El hombre gris
No lo sospecha nadie. Es un cuerpo vacío;
Vacío como pampa, como mar, como viento,
Desiertos tan amargos bajo un cielo implacable.
Luis Cernuda.
Vacío como pampa, como mar, como viento,
Desiertos tan amargos bajo un cielo implacable.
Luis Cernuda.
Viste una mirada cansada
una camisa arrugada que delata - tal vez -
algún exceso nocturno
por ese hombre que pasea
en traje gris la mañana
se han descosido cien imperios
se han derrochado mil guerras
por ese hombre que observa
con lasciva calma de gafas de sol
los cuerpos aún claros de las adolescentes
y en su teléfono arregla
la compra-venta de almas
se han cambiado cien palabras
han ardido mil libros
pero cuando explica el mundo
parece que lo comprendiera
me pregunto si abotona
con verdades su chaqueta
o el brillo de sus zapatos
le obliga a caminar a ciegas
me imagino que el balance
de su vida - claro - es exacto
y en su maleta no acepta
más dudas ni más recuerdos
pero le he visto en las barras
contar con palabras de noche
la incierta ciencia que atesora
y sé que guarda un vacío
aunque desconozco dónde
me gusta pensar a veces
en el bolsillo de su americana
donde guarda su cartera
muy cerca del corazón.
1 comentario:
¡Hola Pelayo!
Un poema fantástico, pero el tamaño de letra de tu blog es muy pequeño. Es posible que sea debido a algún error de configuración de mi explorador, pero sólo me ha ocurrido contigo. ¿Podrías subirle un puntito más?
¡¡Saludos!!
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