Validez para siempre
Tendré que recorrer
los bosques todos,
para saber algo
de tus ojos.
Pablo Ardisana
Escribo desde una noche que aún no ha sucedido
en estas horas necias de casa de los padres
cuando Uno ya ha crecido
y en todos los objetos hay un recuerdo tierno
encuentro en un cajón el carné de mi abuela
fallecida hace un mes
nació el 17, Diciembre, 1912
Oviedo
Cristo de las cadenas, sin número
VALIDEZ PARA SIEMPRE
descubro que su madre se llamaba Carlota
prometiendo a mi hija, aún inexistente, un nombre tan bonito
admiro sin descanso su firma aletargada
con letra de una niña de ochenta y tantos años
rebusco un poco más en el cajón
y visto en mi muñeca su reloj
doy cuerda a unas agujas que responden cansadas
contra el silencio oscuro de casa de los padres
la noche de partida, con la maleta a medias
tratando de llevarme, entre camisas planchadas
un trozo de la respuesta
por la que salí al mundo
1 comentario:
Esos recuerdos sí que tienen VALIDEZ PARA SIEMPRE.
Saludos.
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