En un instante

tal vez hayas conocido esas tardes de olvido
en las que el tedio, travieso
se aburre de estarse quieto
entonces sucede, en un instante
sobreviene la pena
sin motivo aparente, sin previo aviso
se ha aproximado despacio, sigilosa
para susurrarnos palabras tristes al oído
sus venenos surcan el cuerpo
hasta alcanzar el corazón
enfermos de sombras
los fantasmas acuden, diagnostican el dolor
no hay solución
muertos en vida, nada parece ya tener sentido
y si desde el ataúd movemos los labios
tratando de explicar que sucede
no encontramos respuesta en nuestro eco
la enfermedad tiene ya, el control del cerebro

dime si has conocido, el olvido en esas tardes
entrégame la receta para volver a la vida
porque hoy me curan tus ojos
y tengo la sensación, que conoces el secreto